Técnica
Los mosaicos de cristal resultan sumamente bellos gracias a la luz que los atraviesa, creando juegos resplandecientes de brillo y color. Sin embargo, se deterioran fácilmente. Por tanto, es preferible utilizarlos como decoración mural, a excepción de las teselas de hoja metálica que resisten bien a las pisadas. Existen teselas de cristal homogéneo, de pasta vítrea, de pasta vítrea en hilo continuo, opacas, de cristal esmaltado y con hoja metálica. Históricamente, aparecen en la Edad Media.